¿Es rentable ser una empresa saludable?


¿Es posible afirmar que el esfuerzo de la empresa en la promoción de la salud tendrá consecuencias directas en su plantilla?

Rotundamente sí, la creación de entornos saludables en la empresa no es sólo uno de los pilares de la cultura preventiva sino que es además una inversión para mejorar su rendimiento. Existe amplia evidencia que demuestra que, a largo plazo, las compañías más exitosas y competitivas son aquellas que tienen los mejores registros de salud y seguridad, y los trabajadores más seguros, sanos y satisfechos.

Mundo Financiero publicaba en enero de 2018 un artículo en el que demostraba que implantar programas de bienestar laboral aumenta los beneficios económicos de la empresa y el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST) presentó en el mes de mayo, en el III Encuentro de Empresas Saludables, un Calculadora para la estimación de los beneficios de la implantación de proyectos de empresas saludables en la situación financiera de la empresa.

Habitualmente cuando una organización decide implantar un plan de empresa saludable no está buscando beneficios económicos, sino beneficios de seguridad y salud para sus trabajadores, sin embargo el resultado final sorprende por al conseguir un incremento en la rentabilidad de la misma.

Así lo afirman desde la compañía Biwel: “Personas más comprometidas, saludables y felices crean empresas más saludables y rentables”, afirma Estel Mallorquí, CEO de Biwel. Para ello necesitan no sólo la planificación y el seguimiento de un plan estratégico de bienestar sino también la implicación entre los diferentes departamentos de la compañía.

Según Mundo Financiero la efectividad de los programas de bienestar se ha demostrado tras varios estudios realizados en compañías en las que se han visto incrementados sus beneficios. “Hemos conseguido un ROI (Retorno de la Inversión) de 2€ por cada 1€ invertido en dos años y reducido un 30% las bajas laborales por TME en empresas industriales y construcción”, declara Mallorquí.

Desde Biwel explican que antes de centrarse en los objetivos cuantitativos las empresas deben plantearse primero por qué y para qué quieren invertir en un programa de bienestar laboral, qué objetivos pretenden conseguir y cómo lo va a valorar el propio trabajador. Es entonces cuando hay que tener en cuenta el VOI (Valor sobre la Inversión) para medir la rentabilidad de las inversiones específicas, por ejemplo, para saber si conviene más realizar acciones puntuales definidas o dar servicios personalizados dentro del horario laboral. “La interralación y combinación de mediciones en la empresa pueden ayudar a cuantificar este valor intangible a simple vista”, añade la CEO de Biwel.

Factores como el reconocimiento y la sensación de pertenencia están muy relacionados con la rentabilidad de una compañía y su capacidad de retener el talento. De hecho, estudios han demostrado que las empresas con trabajadores felices son hasta un 20% más productivas.

No son pocos los estudios que cuantifican la repercusión económica de la inversión en salud y bienestar de la plantilla. Son diversos los resultados de los mismos, dependiendo de sectores y volumen, pero todos los estudios poseen un nexo común: la repercusión económica en positivo. De lo que se deduce que invertir en empresa saludable es rentable.

En el estudio sobre la promoción de la salud y la cultura del bienestar en la Empresa de organizaciones del IBEX 35, se destaca que “la inversión ideal para una iniciativa de bienestar de la organización sería un mínimo de 150 euros por empleado/año”. Sin embargo es muy dispar la inversión que realizan en bienestar las diferentes empresas del IBEX.

Siendo conscientes las empresas del IBEX del aumento del balance de la empresa cuando sus empleados adoptan estilos de vida saludables, sólo un 33% de ellas realizan estudios de rentabilidad. Por el contrario, en Estados Unidos, donde programas de empresas saludables se desarrollan desde los años 70, consideran que una inversión de 1$ en programas de salud y bienestar supone un ahorro de 3$ empleado/año.

Según la World Economic Forum, The Wellness Imperative, Creating More Effetive Orgainizations cuando el bienestar laboral se promueve activamente en el trabajo:

  • Las organizaciones son vistas 2,5 veces más eficientes.
  • Las organizaciones son vistas 3 veces más productivas.
  • Los trabajadores están 8 veces más comprometidos.
  • Las organizaciones son vistas 3,5 veces más animadas a la creatividad e investigación.
  • Las organizaciones son vistas con 4 veces menos de probabilidades de perder talento en el próximo año.

Y nos encontramos otros muchos beneficios:

  • Reducción de los accidentes no laborales y las enfermedades comunes.
  • Reducción del absentismo y el presentismo.
  • Reducción de costes por contratación temporal, formación de personal eventual y de suplentes.
  • Reducción del estrés.
  • Mejora del clima laboral.
  • Mejora de la participación y motivación de los trabajadores.
  • Mejora del ánimo y compromiso de los trabajadores con la organización.
  • Mejora de la productividad y competitividad.
  • Mejora de la imagen corporativa de la empresa.