Aunque la remuneración económica de un trabajo es fundamental, pues nos debe permitir mantener un nivel de vida digno, en nuestra sociedad cada vez cobra más importancia esa remuneración no económica a la que llamamos Salario Emocional.
Factores como el buen ambiente laboral, los planes de formación o los programas de conciliación y flexibilidad están adquiriendo cada vez más importancia para trabajadores y empresas. Como ejemplo, un estudio realizado por Adecco, en España uno de cada cinco trabajadores prefiere que su empresa le ofrezca formación antes que una subida salarial.
El salario emocional son todos aquellos beneficios no monetarios que una empresa ofrece a sus empleados además de su sueldo a final de cada mes, o lo que es lo mismo, conseguir que el trabajo llene moralmente las expectativas de un empleado de tal forma que vea un futuro estable dentro de la compañía y no quiera marcharse.
Por ese motivo, muchas empresas se esfuerzan cada vez más en buenas condiciones en los puestos de trabajo y cuidar a sus empleados, tanto física como emocionalmente, con medidas y planes saludables.
Veamos en qué consiste ese Salario Emocional:
- Horario flexible: lo importante es realizar nuestro trabajo, sin importar tanto estar en la oficina de 8:00 a 17:00 horas.
- Teletrabajo: realizar el trabajo desde casa, especialmente valorado por las nuevas generaciones.
- Formación: la empresa nos ayuda económicamente en el desarrollo de nuestra carrera profesional.
- Promoción profesional: tener claro que en tu empresa puedes empezar desde abajo pero tendrás la oportunidad de demostrar que puedes ocupar puestos más importantes y que te den la posibilidad de acceder a ellos.
- Buen ambiente laboral: un entorno laboral sin conflictos, en los que todos saben cuál es su lugar.
- Ser parte de la empresa: que cuenten con tu opinión en la toma de decisiones.
- Guardería: servicio de guardería en nuestro lugar de trabajo durante todo el año o bien durante las vacaciones escolares.
- Días libres: para disfrutar de tu cumpleaños, de los cumpleaños de tu familia o para acompañarlos en momentos difíciles o dolorosos.
- Beneficios sociales: planes de pensiones, seguros médicos, ayudas para la educación de los hijos.
- Espacios de distracción: para poder relajarnos y distraernos del trabajo.
- Voluntariado: la empresa promueve actividades de voluntariado en las que puedan colaborar sus trabajadores.
- Reconocimiento: una palmadita en la espalda, un “enhorabuena”, un “genial qué bien lo has hecho”.
¿Realmente cuesta tanto?, ponlo en práctica en tu empresa